Un paseo por el bosque/12 de febrero 5 pm/Kate

Era un día lluviosos,estaba bastante frió y que mejor que dar una vuelta por acá...por el bosque. Llevaba mi impermeable amarillo con mis jeans azules y las botas caña alta para la lluvia.Caminaba lentamente mientras caían pequeñas gotitas sobre mi cuerpo.Me senté detrás de unos arbustos mientras miraba todo.Solamente estaba en busca de paz, de poder estar solo yo y yo.La verdad ya estaba un tanto sofocada en casa.Escuche unos pasos que se acercaban lentamente.Tuve una visión, el rostro de una joven chica se acercaba a mi.Me quede quieta esperando a que la chica apareciera, hasta que volvi a escuchar las ramas caídas quebrarse mientras alguien se acercaba.Cuando aquella joven estaba lo suficientemente cerca sali de atras de los arbustos y en mi rostro dse dibujo una gran sonrisa.
Hola-dije sonriente.sorprendiendo a aquella chica.

Estaba demasiado aburrida como para quedarme en casa haciendo nada, de vez en cuando era demasiado hiperactíva. Para colmo Derek estaba ocupado como para hacer algo con el, como trepar árboles o jugar fútbol.
Tomé mi impermeable ya que con el clima de Forks debía llevarlo conmigo siempre, no tenía claro a donde iría, pero lo que si sabia es que tenía que salir rápido de casa porque sino el aburrimiento sería fatal, aun no terminabamos de desempaquetar las cosas por lo que algunos libros aun estaban en las cajas, llenos de polvo esperando que alguien los leyera. Me encargaría de hacerlo.
— Mamá, saldré a dar una vuelta. — Anuncié mientras me colocaba el impermeable y subía el cierre qué hacia un ruido espantoso, lo odiaba.
— Vé con cuidado cariño. — Gritó mi madre desde la cocina, asentí aunque no pudiera verme mientras me dirigía hacia la puerta. No conocía nada de Forks.. pero supongo que no me perdería.. ¿verdad?.

Salí de la casa mientras observaba todo, el bosque parecía llamarme. Amaba la naturaleza por lo que tendría que ir a dar una vuelta por allí, el aire libre y el aroma natural me atraían inmensamente, sería bueno para pensar un rato o al meno intentar eso.
Las calles de Forks estaban deshabitadas, parecía de esas peliculas de Cowboys en las que los pueblos estan abandonados, eso era Forks. Un pueblo abandonado.
Llovía intensamente y hacía un frío que me congelaba. Presioné mis brazos sobre mi vientre buscando desesperadamente algo de calor, fue inútil pues el frío me recorría toda la espalda.
El terreno estaba lleno de huecos y pozos - como era de esperarse -. Avancé dandome paso entre las hojas y arbustos que sobre salían en el camino, espesos. El boque era verdaderamente hermoso, aunque algunos crujidos hacian que diera vueltas como un tronco buscando a el causante.

No me percaté de que habia pisado al rededor de diez mil palitos y que probablemente fuera causante de todos los crujidos. Pero pronto sentí que alguien caminaba entre los arbustos. Me quedé expentante, sin poder moverme siquiera, esperando que aquella persona saliera.
Hola- Dijo ese alguien, causante de muchos sustos en este día. Pegué un salto tremendo cuando escuché aquella voz, aterciopelada que estaba en mi espalda.
Me di vuelta lentamente para observar a una chica con el cabello corto, llevaba un impermeable amarillo al igual que yo. Suspiré tratando de obtener un poco de aire, desesperadamente.
— Hola. — No podía decir nada más, ni siquiera moverme. Estaba petifricada allí mientras el frío me helaba la sangre.

¿Disculpa si te asusté? pues vale, estás disculpada porqué me he llevado un sustaso enorme. Suspiré mientras me ponía una mano en el pecho tratando de que el aire volviera a mí, cerré los ojos y aflojé los hombros que estaban rígidos.
— No.. está bien. —Dije mientras sonreía levemente, tratando de que no se notara que aun estaba nerviosa.
— Kate. —Respondí, mientras extendía mi mano hacia ella y le observaba. Era guapa, me gustaba su corte de cabello. Luego de tranquilizarme por un momento sacudí la cabeza, observandola.
Me rei un poco por el no muerdo, era obvio qué no lo hacia. Bajé la mirada un momento buscando que decir.

— Ya, lo imagino. Disculpa mi reacción es que soy, algo asustadisa. — ¿Algo? ¡Vamos Kate, no mientas!. Observé el lugar buscando algo donde sentarme -o sentarnos-. Cuando encontré un tronco caido me acerqué a el y me senté allí, invite a Alice a sentarse conmigo con un gesto de mano.
— Sí quieres.. puedes sentarte. —Dije sonriendo. La observé con cuidado pues no me explicaba como era tan hermosa. Tenía unos ojos color canela y una piel extremadamente pálida, me preguntaba si no se sentía mal.
Sus ojos brillaban y su sonrísa era perfecta.. no lo entendía.